Puede que haya escuchado las historias - de cámaras que parecen encendedores, destellos de luz dentro de recovecos y rincones en un baño público, subiendo por el metro - pero pueden haber sonado como historias de otras personas. El 9 de junio, unas 22.000 mujeres se reunieron en Corea del Sur para decir que no lo son. Podría pasarle a cualquiera. Según estimaciones de la policía, ha habido más de 6.000 casos de cámaras espía cada año entre 2013 y 2017. Pero el número real es probablemente mucho mayor.
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