Como todo el mundo sabe, en España no hay corrupción, hay conspiraciones, de forma que en vez de tener corruptos, tenemos víctimas de conspiraciones: conspiraciones contra mi nación, conspiraciones contra mi partido, el juez que no le caigo bien, el director del periódico rencoroso... Un chollo. España es como esos padres modernos que les viene su hijo con el cuento de que el profesor le tiene manía, y terminan abroncando al profesor y comprándole una moto al hijo.