En 1929, Antonio Espina, colaborador de La Gaceta Literaria, publicó un artículo que me impresionó: “Cita del 3 y el 0” o sea 1930 como año en que “había ya que definirse”. La politización en la literatura comenzaba y el mismo Antonio Espina daría testimonio de ello cuando a primeros de ese año 1930, Ramón Gómez de la Serna me ofreció un banquete en «Pombo» con más de cien comensales y en el que a su final, mientras Rafael Alberti repartía un panfleto contra la Revista de Occidente en el que aparecía de «damo» Antonio Marichalar, acompañando si