En las últimas décadas, la industria alimentaria ha aumentado considerablemente el uso de fructosa para mejorar el sabor de los alimentos. A lata de refresco de 340 gramos tiene normalmente unos 39 gramos (9,7 cucharaditas) de azúcar, de los cuales, la mitad es típicamente fructosa. La fructosa es el más dulce de todos los azúcares naturales. Al igual que otros azúcares procesados, algunos estudios han relacionado la fructosa con la epidemia de obesidad, un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y la resistencia a la insulina...