La crisis ha cambiado los hábitos y la manera de vivir de la mayoría de las personas. La incertidumbre sobre el futuro ha afectado también al ahorro familiar que ha intentado ser mayor en los últimos años. Sin embargo, según el Instituto Nacional de Estadística, 2014 fue un año en el que se gastó más que los anteriores. La tasa de ahorro de los hogares fue del 9,8% sobre su renta, seis décimas menos que en 2013, mientras que el consumo aumentó en un 2,3%. El ahorro financiero, en cambio, aumentó en los hogares en un 6,3%, según datos recogidos