El Altai, un remolcador de la Flota del Norte de la armada rusa, atracado en el archipiélago de la Tierra de Francisco José, llevaba varios investigadores de la Sociedad Geográfica Rusa. Pero “las latitudes polares están llenas de peligros”, según la nota de prensa. La nota de los militares no hace mención alguna a la pérdida de parte del equipo científico, al contrario de la versión de los científicos, que también recuerda que “un bote se fue a pique”, si bien “la tragedia se evitó gracias a las acciones del "líder del escuadrón" militar.