Tras meses de silencio, por fin, los obispos españoles han hablado y lo han hecho en tropel, desde la cúpula más elevada hasta el último peldaño episcopal. Pero no cantemos victoria. No han hablado de la crisis, ni contra la reforma laboral, ni contra los recortes, ni para denunciar el incremento de la desigualdad en la sociedad española, Lo han hecho para condenar la sentencia del Tribunal Constitucional a favor de la constitucionalidad de la ley del Matrimonio Homosexual. No solo quieren ser co-gobernantes y co-legisladores. No sólo jueces