no de los últimos elementos hallados ha sido un consolador de madera ―el primero que se conoce del mundo romano― y que inicialmente fue considerado una herramienta para zurcir. Pero los arqueólogos de la Universidad de Cambridge Rob Collins y Rob Sand, en su informe Touch wood: luck, protection, power or pleasure? A wooden phallus from Vindolanda Roman fort (Tocar madera: ¿suerte, protección, poder o placer? Un falo de madera del fuerte romano de Vindolanda), lo desmienten y aseguran que se trata del consolador de una mujer,