El 23 de mayo, Ucrania atacó con drones la estación de radares de Armavir (Krasnodar, al norte del Cáucaso). Tres días después, el día 26, el mismo ataque se repitió contra la estación de Oremburgo (Siberia Occidental), a 1.700 kilómetros al noreste de Armavir. Ambas instalaciones forman parte del sistema ruso de alerta temprana de misiles nucleares...La resistencia rusa está provocando el incremento de la temeridad de Occidente en su ofensiva. Eso obliga a Moscú a prepararse para el escenario de un conflicto aún más directo y largo con la OTAN