En las últimas semanas, en esos magacines matinales y vespertinos, han invitado a varios militares que dicen ser trans, pero que prefieren mantener su aspecto y que les sigan llamando por su nombre. Aunque el Registro Civil debe perseguirlo y demostrarlo, resulta obvio que es un fraude de ley. Y si no lo persiguen serán también responsables de estos hechos. Darles voz a esos mentirosos, solo lleva el debate a una zona irresponsable. Todo lo contrario ocurrió cuando Jordi Evole entrevistó a Josu Ternera...