Javier López Madrid aka “Compiyogui”, condenado a prisión por las tarjetas black, detenido en el curso de las operaciones Lezo y Púnica, acusado de presuntos sobornos, está a punto de conseguir una operación redonda de la compañía que todavía preside, Ferroglobe (fusión de Ferroatlántica, la compañía de su suegro José Miguel Villar Mir, y la británica Globe): vender las centrales hidroeléctricas cuya concesión pública habían obtenido para que suministraran energía a su factoría de Hidrocarburos en Cee (A Coruña).