Los controladores atacan de nuevo. Y siguen sin tener razón, aunque venga ahora el PP a echarles una mano sólo por el gusto de embestir contra el ministro de Fomento, José Blanco, como ayer hizo el portavoz del partido de Rajoy, Esteban González Pons, que hace a Blanco responsable político de las sospechosas bajas laborales amontonadas en estas últimas setenta y dos horas. No se entiende que el principal partido de la oposición se vuelva inesperadamente comprensivo con un colectivo que tanto daño ha causado a los ciudadanos.