Tan ensimismados en sus comentarios que ni Pedro Sánchez, el secretario general del PSOE, ni Óscar Puente, alcalde de Valladolid, ni el séquito que les acompañaba se han debido de dar cuenta de que se saltaban un semáforo en rojo. Con la luz del peatón bien "colorada", Sánchez, junto con el alcalde de Valladolid de anfitrión y cicerone por la capital del Pisuerga, han atravesado la calle infringiendo las normas. Con cara de total tranquilidad, han cruzado con la señal luminosa en rojo que pedía a los peatones en ese momento aguardar su turno.