Los trastornos por uso de sustancias o TUS representan un problema considerable de salud pública. Por desgracia, existen pocos medicamentos seguros y efectivos para tratarlos, y la eficacia de los que existen es mejorable. Hay importantes obstáculos financieros y científicos para el desarrollo de nuevos compuestos, pero el reciente descubrimiento de nuevos receptores y circuitos neuronales ofrece nuevas oportunidades para desarrollar farmacoterapias novedosas. Es necesario un enfoque científico sistemático para demostrar su seguridad y eficacia