A los hipopótamos no les gustan nada de nada los extraños de su propia especie. Es más, se dedican a rociar caca de manera agresiva en cuanto escuchan las voces de desconocidos. El nuevo estudio ha sido publicado esta misma semana en
Current Biology y tiene como investigadora principal a Julie Thévenet. El estudio se realizó en la Reserva Especial de Maputo, en Mozambique. Allí se grabaron las llamadas de siete grupos de hipopótamos (
Hippopotamus amphibius) en tres lagos.