La maniobra de Lasso presenta un obvio paralelismo con el intento del depuesto presidente de Perú, Pedro Castillo, de disolver el Congreso en vísperas de una votación para destituirlo e instalar en el poder a un grupo afín a los grandes capitales, como en efecto ocurrió. Aunque las acciones de uno y otro fueron análogas, las reacciones internas y externas no pudieron ser más distintas. El maestro rural fue traicionado por las Fuerzas Armadas, encarcelado y rápidamente demonizado por medios de comunicación, organismos internacionales y multitud