El desfile pudo haberse llevado a cabo en el Puente Romano de Córdoba, pero al alcalde de esta ciudad, José María Bellido, del PP, le parecieron excesivos los 500.000 euros que le pedía la empresa del diseñador, con la que al final no llegaron a un acuerdo, según adelantó el digital Cordópolis. Almeida, en cambio, accedió a que se realizara en Madrid bajo el argumento de que no supondría gasto para el consistorio y que serviría “como promoción de la capital” dado que, según sostuvo, la marca Palomo Spain “tiene proyección internacional”.