El sábado 18 de diciembre de 1971 Francisco Franco pasaba unos días de descanso con su familia en el castillo de Mudela, en Viso del Marques (Ciudad Real), cuando cuatro objetos voladores no identificados se pararon sobre esta residencia palaciega. El caudillo, por raro que parezca, se disponía a realizar un chapú, una aparentemente sencilla reparación eléctrica, arreglar un enchufe, pero unos extraterrestres (quizás eran rojos, es decir, de Marte) le sabotearon, dejándole a oscuras.