Recientemente, la revista Nature publicó un estudio, reseñado en este medio, que señalaba la “crisis de valores” actual al estimar la naturaleza desde criterios económicos. Su investigador principal, Unai Pascual, instigaba a “redefinir conceptos tan manidos como progreso, desarrollo y bienestar”, precisamente para evitar el sesgo instrumentalista que ha caracterizado a la Modernidad. La comunidad científica, parecía alertarnos, ha llegado a la conclusión de que esa distancia entre nosotros y la Tierra debe acortarse.