Han transcurrido apenas cuatro años desde que Manuel Lamela, entonces Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, destituyera a Luis Montes, coordinador de urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés. Lamela y los medios de comunicación de la cuerda de Esperanza Aguirre (la COPE, el Mundo, Telemadrid, La Razón...) se lanzaron al cuello de Montes. El nacionalcatolicismo madrileño le bautizó 'doctor muerte' y 'Terminator', y se llenó la boca hablando de 'homicidios'. Artículo de Javier Pérez de Albéniz.