Sin la legitimidad otorgada por la lucha guerrillera contra el régimen de Batista, pero con el firme apoyo de Raúl Castro, el ex profesor universitario y nuevo presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel, tiene ante sí el reto de guiar a un país y a una revolución que ya ha trascendido en la historia, pero que con la renovación en los liderazgos y manteniendo los principios ideológicos del socialismo, busca adecuar el viejo sueño de un hombre nuevo, a los tiempos permeables de internet y el influjo de la globalización.