edición general
11 meneos
111 clics
Kashia, el capitán contra la homofobia de Georgia

Kashia, el capitán contra la homofobia de Georgia

En Georgia, uno de los países de Europa donde el colectivo homosexual está más perseguido, recibió críticas de todo tipo. "Kashia, no olvides que eres georgiano y debes velar por tu honor", "si este personaje sigue en la selección, no iré al estadio" o "Kashia hace propaganda de los gays" fueron algunos de los mensajes más duros que recibió a través de las redes sociales, lo que provocó que el jugador suprimiera temporalmente sus cuentas.

| etiquetas: georgia , homofobia , fútbol
La homosexualidad en el deporte profesional sigue siendo un tabú también en España, no hay que irse tan lejos.
#1 Si solo fuese la homosexualidad...

Los mismos comportamientos deleznables los están recibiendo los deportistas negros y lo de ascendencia extranjera de parte de los que ven deporte con unas cervecitas y patatitas en la salita de su casa.
#1 en España no es de un problema políticos como Abascal o futbolistas como Carvajal admiten ser gay i al menos le gusta aparentarlo
#4 ¿Abascal?
¿Querías decir Maroto o Marlaska?
#5 mira las fotos de Abascal, más gay no puede ser
#6 No tengo tanta agudeza visual como para detectar la orientación sexual de los demás en una foto.
Me refería en mi comentario inicial a que en España no conozco deportista de élite que hayan salido del armario.
Edit:
Tampoco es que siga el deporte ni su prensa.
#7 para la ironía tampoco tienes agudeza.
#8 Se ve que tú tampoco porque no la has aplicado.
Georgia ha cambiado una barbaridad en los último siete años. Estuve de testigo en los linchamientos públicos permitidos por la policía durante las manifestaciones del orgullo que hubo en Tiflis por aquellos entonces. Hace dos años, vi drag queens por la calle un sábado por la noche, algo impensable hace 10 años.
Ha ayudado también que tengan uno de los templos del techno mundial en estos momentos: Bassiani. Dedica alguna noche a público gay fiestas temáticas.
Pero fuera de Tiflis, las cosas no han cambiado tanto.

menéame