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¿Cuál es el límite del insulto en política?

El lenguaje político se ha vuelto más ofensivo y polarizante y usa insultos como estrategia para captar atención y movilizar opinión pública. Esto no hace más que reflejar un empobrecimiento del debate ideológico. La sublimación de esta estrategia incisiva y dramática son los llamados “zascas”, mediante los cuales se intenta dejar sin respuesta al rival con una réplica cortante, rápida y a menudo ofensiva. La Fundeu los representa con la imagen de una agresión.

| etiquetas: límite , insulto , política
No estoy de acuerdo. El zasca se produce sobretodo cuando un político (generalmente de derechas) hace su exposición basada en mentiras, falsedades u ocultamiento de la verdad y la respuesta del otro político ( generalmente de izquierdas) le replica con datos verdaderos, objetivos y contrastados. Yolanda, con su: le voy a dar un dato u Óscar Matute, utilizan datos objetivos que desmontan las mentiras de la derecha sin necesidad de insultar, por lo que la crispación viene de quien argumenta con mentiras y la equidistancia no es válida para culpar a todos por igual.
#4 Zas en toda la boca
Viendo el “me gusta la fruta” , ninguno
#7 lo que debería darte miedo es nadar con el peso de tu cara de cemento armado
#7 entonces porque no dio la cara y dijo que lo había dicho porque andar con mentiras a los ojos de todos?
Tampoco podemos pedir mucho a 7291
#7 Vaya, vaya, vaya... tenemos un aprendiz de Pecas buscando su sobre por aquí... siga, siga intentándolo a ver si lo consigue... le recomiendo incluir la próxima vez... coletas, Venezuela, ETA, España se rompe...

P.S. Hablando de miedos... el PP sí es una organización criminal... declarada por los jueces...
A mí ya me parecía de cazurros infantiles cuando Felipe González y Aznar se insultaban... Lo de hoy en día es indigno para la ciudadanía.
En estos momentos Milei va marcando el paso en ese sentido. 
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menéame