Hoy he ido al Ikea

A por cuatro cosas nada más, de esas que resaltan el precio en amarillo en la web y joder, una vez allí lo que me ha costado encontrarlas. Y eso que soy soltero.

Creo que va a ser que me estoy haciendo mayor y no salgo mucho de casa pero en vez del Ikea de siempre, no sé por donde he entrado, que he aparecido en un almacén. Me ha recordado a unas semanas que llevé el traspalé cuando era joven.

La cuestión es que he ido a unos monitores al fondo a buscar lo que tenía mirado pero cuando le daba a "ubicación en la tienda", en lugar de pasillo y módulo decía "decoración".

Claro, cuando le he preguntado a uno de uniforme por la sección "decoración" ha sido como si le preguntara por la sección de muebles.

Espera un poquito, repasa los pasillos revisando los nombres en sueco... En sueco, ¿eh? así para que se quede fácil, aunque sólo nos acordemos del armario Billy. Nada, que no, que lo barato lo tienen escondido, unos precios.. he pensado que me había equivocado de pasillo y todo.

Otro uniforme, que trabaja con referencias, dice. A veces piden referencias, sí. Yo no sé si cuando he entrado y he señalado una abertura entre cajas a dos tipas que había ahí, al ir con la mochila y mis pintas han pensado que entraba a trabajar. Total, vuelta a los monitores a por la referencia, que eso sí que sale.

Pero la llave maestra que relaciona la referencia con el pasillo y el módulo, esa maquinita en plan TPV, ah, eso sólo lo tienen los de uniforme. ¿no sería más sencillo mostrar el pasillo y el módulo en los monitores? Pues no he sabido encontrarlo, oye. La chica me facilita una de las dos ubicaciones que necesito indicando que se tiene que ir, atareada. Me despido con reciprocidad: "que te ayuden lo mismo que tú a mí". Pensaba que no lo iba a necesitar pero mejor voy a buscar un carro, esta pequeña gyncana se puede alargar algo más de lo previsto.

Cuando hallo la primera referencia, ¡ah, culpables! No está la etiqueta con su nombre sueco. Si es que parece que escondan las ofertas. Por eso no lo había visto, me he chupado el pasillo varias veces y había más PAX que con los romanos oye, más PAX que un cementerio, sin uniformes a la vista. Muy apropiado para los tiempos que corren por cierto, ojalá no fueran sólo meras etiquetas.

Pues nada, ya tenemos una, otro tipo un poco más simpático me ayuda con otra. Está bien ser bueno con los compañeros que empiezan en el primer día en el almacén, cuando no les han dado ni siquiera su uniforme y más si ni siquiera han tenido tiempo de quitarse la mochila. Siempre es bueno empezar con buen pie.

Esta vez sí que está la etiqueta y el llitl... el litj...el lillj...bueno, da igual, que estaba ahí y no lo he visto eclipsado por tanta PAX. ¿Peor qués un mueble de comedor? ¿Cómo puede tener tantas piezas? En fin, que he visto que no lo he visto justo después de comentarle al tipo que la primera etiqueta no estaba (en los trabajos hay que empezar a sumar puntos desde el primer día). y seguramente la segunda tampoco, cachis. Bueno, por lo de la compi, mitad y mitad.

Total que con mis dos referencias en oferta ya en el carrito (de una he comprado tres, eh) me marcho para la caja no sin antes haber tenido tiempo de probar en el interludio las posibilidades para el patinaje del carrito en cuestión. Si os parece ridículo me he cruzado con un par que llevaban a otro del carrito. Está bien que hay buen ambiente en el trabajo. Y sí, claro, llegas a la caja y la sospecha se confirma, y lo sabes: tú también trabajas para Ikea. Incluso tienes una supervisora que mira sin mirar de esa manera que sólo mira quien supervisa. Cualquiera que haya tenido jefe lo sabe. Fíjate si supervisaba que le he preguntado donde le dejaba el carrito.

Pero ya te digo si me lo olía que llevaba un rollo de precinto de casa, porque eso así suelto debajo del brazo...como que no. Y en el trabajo, pues bueno, al final si no te ponen los medios, pues qué más remedio te queda que ponerlos tú. Pero vaya, ¿estos no son los que repartían los lápices de los gnomos?

Y sí, sí, allí a la salida de la caja me lo he envuelto para regalo (había pensado hasta en hacerle un asa pero no ha hecho falta) y tan bien me han visto los aficionados a la logística que ni siquiera he tenido que declinar sus propuestas, como un señor. Un señor, que trabaja en Ikea.

Ni un día he estado parado :D