La Audiencia Provincial de Barcelona condenó a Lionel Messi y a su padre, Jorge Horacio, a 21 meses de prisión por tres delitos fiscales. El mes de junio de 2016, el futbolista del Barça y su padre fueron juzgados por defraudar 4,1 millones de euros a Hacienda durante los ejercicios 2007, 2008 y 2009, consecuencia de no haber tributado en España los ingresos de 10,1 millones percibidos por los derechos de imagen del delantero rosarino durante ese periodo.
Messi ha declarado esta tarde que es cierto que defraudó, pero que era su forma de luchar contra el centralismo estatal. Concretamente, desde el mundo deportivo y contra el estandarte del PP en deportes, el Real Madrid.