cultura y tecnología
13 meneos
45 clics

Los mapas del alma no tienen fronteras

"- Hay tierra suficiente para acoger a estos hermanos", decretaron los ancianos. A raíz de la guerra civil de 1998 en Guinea-Bisáu y la llegada de refugiados, nuestro pueblo creció. En este periodo de "crisis humanitaria", como dice la tele, Temanto siguió siendo un lugar abierto. Entre nosotros nadie paga alquileres, ni por un techo ni por un terreno, y los recién llegados siempre han encontrado a alguien que les ayuda a construir su choza o a sembrar la primera cosecha. Al año siguiente, tienen que arreglárselas solos, pero mientras tanto,

| etiquetas: frontera , antropología

menéame