Las espinacas, como todo lo verde, son un alimento problemático para los niños. Muy pocos las transigen, a menos que estén bañadas en bechamel o queso, por supuesto. Menos mal que con el paso de los años la adultez transforma nuestro gusto y hace que sepamos apreciar el delicioso sabor de estas hojas. Pero no solo saben bien, también tienen una propiedad increíble que acaba de ser descubierta: protegen nuestro cerebro de la demencia senil.
|
etiquetas: espinacas , protección , cerebro , ancianos