Entre los apasionados del turisteo están los adictos a los museos, los amantes de las iglesias, los fans de los restaurantes... Y también, los que tienen cierta debilidad por los mercados. De hecho, las plazas de abastos se incluyen cada vez más en las guías turísticas de la localidad en cuestión, y tiene su porqué: han acabado siendo una parte tan esencial de la cultura de cada ciudad que quien quiera saber más acerca de la historia y la forma de vida de ese lugar tiene que darse una vuelta por su mercado.
|
etiquetas: españa , solera , mercado , comercio , turismo , ciudades