En comparación con estudios anteriores, afirma, “encontramos una masa planetaria menor y una órbita más cercana, más elíptica y más alineada con las órbitas de los planetas conocidos del Sistema Solar”, todas ellas pistas que podrían ayudar a los astrónomos a saber dónde buscarlo.Físicamente, la mejor estimación es que tiene 4,4 veces la masa de la Tierra, algo que podría convertirlo en una supertierra o un mini-Neptuno.
arxiv.org/abs/2410.18170