Los españoles son los ciudadanos de la Unión Europea que más pagan por la electricidad y el gas. Es más, esa diferencia con el resto de países de la unión es cada más más acusada. Mientras en España el coste es de 0,215 euros por kilovatio-hora (en paridad de poder adquisitivo), en Alemania es de 0,128 euros y en Francia es de 0,106 euros. También en Italia es menor, de 0,143 euros, en Portugal es 0,126 euros y en Reino Unido es de 0,127 euros. Esto significa que el coste en España es casi el doble que entre los principales países comparables.