#1 Yo suscribo todas excepto "tiebnen", "llos", "ponposamente", "esopalda", "lagente", "smujeres", "elso" y "raxismo". Bueno, esopalda sí la suscribo, que ya me va sonando bien
#250 No son del todo comparables, pero si es bastante aproximado. Hay derivaciones a la pública cuando un hospital no privado no está preparado para un caso en concreto, eso suele pasar en provincias pequeñas y si el caso es complejo tb en medianas. Pero ojo, la SS presenta factura.
Si es una derivación paga la aseguradora, que luego se dará de hostias o no con el hospital privado que ha derivado .
Hay partidas que si se pueden sumar, como los medicamentos. Y por otro lado hay un sesgo de edad ( aunque el colectivo MUFACE es bastante viejo y muy siniestroso para ser laboral y no tengo claro que el % de abueletes sea menor) .
De todas formas no creas que el gato iba a ser mucho menor que el del ciudadano medio. Algo por optimizacion de estructuras igual si, pero no esperes milagros.
Las compañías hasta ahora cambiaban cromos o perdían cantidades asumibles con la póliza, que luego más o menos equilibraban apretando a los hospitales en baremos por el volumen que te daba Muface. El problema es que la concentración hospitalaria ha cambiado las reglas del juego y ahora la aseguradora no puede repercutir. De hecho es el hospital el que aprieta
Si es una derivación paga la aseguradora, que luego se dará de hostias o no con el hospital privado que ha derivado .
Hay partidas que si se pueden sumar, como los medicamentos. Y por otro lado hay un sesgo de edad ( aunque el colectivo MUFACE es bastante viejo y muy siniestroso para ser laboral y no tengo claro que el % de abueletes sea menor) .
De todas formas no creas que el gato iba a ser mucho menor que el del ciudadano medio. Algo por optimizacion de estructuras igual si, pero no esperes milagros.
Las compañías hasta ahora cambiaban cromos o perdían cantidades asumibles con la póliza, que luego más o menos equilibraban apretando a los hospitales en baremos por el volumen que te daba Muface. El problema es que la concentración hospitalaria ha cambiado las reglas del juego y ahora la aseguradora no puede repercutir. De hecho es el hospital el que aprieta