"Finalmente, a principios de 2012, se indicó al Grupo Municipal que se le destinaba un local en la calle Recodo, para el que había que rehabilitar y contratar las instalaciones de luz, agua, teléfono, etc., deshabilitadas por impagos a las respectivas compañías suministradoras", ha señalado el grupo.
Según UPyD, Gamonal solicitó hace ocho meses una entrevista con el alcalde de Alcorcón para tratar el asunto. Sin embargo, ha denunciado que ésta "aún no se ha producido" y que incluso "no ha recibido tan siquiera una respuesta a dicha solicitud, que UPyD vuelve a reiterar nuevamente".
Local habrá. Ahora bien, las condiciones parecen ser las que son.
Por cierto, el alcalde dice que su grupo de 15 concejales tiene 2 cargos de confianza pero se afirma que eso no es así:
"Esta es la labor que un solo concejal ha realizado, incluso, sin contar con los medios necesarios que deben estar a disposición de los concejales de la oposición, tal como establece la legislación vigente, mientras el Grupo Municipal del Partido Popular cuenta con cerca de 60 cargos de confianza y toda la plantilla municipal a su servicio", ha criticado UPyD.
Bueno va, pues ya está. Me ha quedado claro: hay que cerrar todas las televisiones de la TDT y dejar sólo intereconomía que es la más objetiva. Hay que joderse... No salgo de mi asombro.
Por otra parte además de impresionante que tengan la jeta de decir eso, es aún más impresionante que hablen de televisiones con "contenido peligroso". ¿Qué es contenido peligroso? No veo en qué el contenido de una televisión es o no "peligroso". Cómo se nota de qué pie cojean, les gustaría volver a la dictadura donde los censores decidían qué era lo "adecuado" y qué lo "peligroso". Resulta que había cadenas de radio peligrosas, películas peligrosas, documentales peligrosos y libros peligrosos.
Mucho miedo hay que tener para ver peligros por todas partes.
Lo que supondrá será una gran pérdida de ingresos.
La concertada pierde muchos alumnos en los cursos no obligatorios, es decir, en lo que no están subvencionados. El alumnado se reduce a la mitad en los cursos que las familias tienen que pagar.
Cinco millones de personas seran candidatas a secundar la huelga, y mientras la cuenta de parados no paraba de crecer con los socialistas, los del sindicato contando la pasta.