Rolex se ha granjeado la fama de fabricar relojes de alta calidad diseñados como piezas de ingeniería capaces de funcionar durante décadas. Testigo de esa calidad ha sido James Steele, un granjero lechero británico de 95 años que perdió su preciado Rolex en la década de 1970 mientras trabajaba con el ganado de su granja. Un veterinario local le sugirió que podría haber terminado en el estómago de una vaca. Imagen del reloj en
www.horolonomics.com/2024/06/the-rolex-air-king-that-became-field.html
Permitidme la broma, pero además salió Seiko.
Y còmo los pierde y ni sabe cómo pues se compra otros, o varios. Pos fale.