El norirlandés Graeme McDowell acabó en junio con 40 años de sequía europea al ganar el Open estadounidense y ahora, en la Ryder Cup disputada en Newport (Gales), ha puesto el punto y final a un épico triunfo (14,5 a 13,5) de Europa sobre los norteamericanos. Europa le debe mucho a McDowell, de 31 años. Está en deuda con él por abrir un hueco en el Open USA antes del verano, un 'major' gafe durante 40 años consecutivos para los europeos, y por ofrecer en el otoño lluvioso una lección de temple, el punto decisivo, en el Celtic Manor de Newport.