El Instituto de Medicina finalmente está reconociendo los efectos tóxicos de la radiación de las mamografías como un factor importante en el desarrollo del cáncer de mama; sólo una mamografía puede exponerlo al equivalente de radiación de 1,000 radiografías de tórax Las mamografías también portan una tasa inaceptablemente alta de falsos positivos--hasta seis por ciento--lo cual puede causar repetidos escaneos que la exponen a aún más la radiación, así como a procedimientos médicos innecesarios, incluyendo biopsias, cirugía y quimioterapia.