Después de un embarazo de 472 días y un parto de tres horas, Orla por fin puede cuidar de su bebé. La cría de jirafa de Rothschild, una de las subespecies en mayor peligro de extinción, pesó, nada más nacer, más de setenta kilos y midió casi dos metros de altura, según informó el Chester Zoo, uno de los recintos más grandes e importantes de todo Reino Unido. Su forma de llegar al mundo ha sorprendido a muchos, que desconocen que el mamífero más alto del mundo da a luz de pie.

Recogió las deposiciones con intención de hacer abalorios para collares, las declaró en el aeropuerto, y cuando los funcionarios vieron lo declarado, la mujer fue detenida en la aduana del Aeropuerto Internacional de Mineápolis. Fue inspeccionada por especialistas en agricultura, y según informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza: "La pasajera declaró heces de jirafa, afirmó que había adquirido los excrementos en Kenia y que planeaba hacer un collar; algo que ya había conseguido usando excrementos de alce en su casa de Iowa".

Una rara jirafa sin manchas nació en el Zoológico de Brights en Limestone, Tennessee, el 31 de julio, convirtiéndose en uno de los animales más populares del zoo, pues expertos creen que es la única jirafa reticulada de color sólido en el planeta. Según el director del zoo David Bright, la última jirafa sin manchas registrada fue en 1972 en Tokio (llamada Toshiko, nació en el zoológico de Ueno). Las jirafas reticuladas son una especie de jirafas con manchas marrones y anaranjadas, nativos de África y en 2018 catalogadas en peligro de extinción.

Seis jirafas demacradas, entrelazadas entre sí, yacen tendidas víctimas de una cruel sequía que azota la región keniana por más de una año.

Las jirafas murieron por desnutrición, provocada por la falta de crecimiento vegetativo y de agua. La foto desgarradora es solo un ejemplo más del cambio climático que ha provocado una prolongada sequía.

El ejemplar llevaba consigo un GPS después de que su madre y su hermana fueran asesinadas por cazadores.

Merelize Van Der Merwe, de 32 años de edad, de la provincia sudafricana de Limpopo, disparó y mató a una jirafa de 17 años el pasado 13 de febrero en el norte del país. Explicó que su marido Gerhardt Nell esperaba llevarla a un hotel de cinco estrellas en Sun City para el Día de San Valentín, pero la noticia obligó a cambiar de planes. Después de acabar con la vida del animal, posó con su corazón y publicó las imágenes en Facebook sin ningún reparo…

Seis turistas franceses y dos ciudadanos de Níger que les hacían de guía turistas y chófer respectivamente fueron asesinados este domingo por dos hombres armados que iban en moto en la zona de Kouré.