El tribunal superior de las Naciones Unidas abre dos días de audiencias sobre una solicitud de Sudáfrica para presionar a Israel para que detenga su operación militar en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, donde más de la mitad de la población de Gaza ha buscado refugio. Más info: apnews.com/article/israel-palestinians-gaza-war-world-court-a69d2abf0f

Mientras el Ejército israelí prosigue sus operaciones en el norte de Gaza y en algunos sectores de Rafah, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) informó que se han agotaron sus reservas en el sur de Rafah, suspendió distribución de ayuda alimentaria allí desde el 11 de mayo. Continúan por ahora en Jan Yunis y Deir el-Balah, pero con capacidad limitada. Según el PMA, se debe a la toma y cierre por parte de Israel del paso fronterizo entre Rafah y Egipto y a la limitada entrada de suministros a través del paso de Kerem Shalom desde Israel a Gaza.

Israel ha seguido matando y dañando a palestinos en Gaza en violación de las órdenes del tribunal, señalan los abogados, mientras sus soldados y líderes políticos continúan expresando públicamente una clara intención genocida. “Cínicamente” el régimen sionista usa el hecho de que no se estableciera un alto el fuego en las audiencias de enero y marzo para cubrir su conducta. Por eso debe hacer explícito ““lo que estaba implícito en órdenes anteriores, y ahora ordene a Israel que cese sus operaciones militares en términos inequívocos y expresos”.

Sudáfrica recalca que las órdenes previas del CIJ no han sido efectivas "Ya sea por falta de claridad sobre lo que exigen exactamente esas órdenes, o porque Israel elige ignorarlas", y ha pedido exigir a Israel "de forma claramente explícita" el cese de sus operaciones militares en la Franja.

Así, ha recalcado que la población gazatí "hace frente a un agotamiento constante, hambre y miedo" y ha reiterado que "ningún lugar es seguro", en medio del aumento de los ataques del Ejército israelí en otros puntos del enclave y tras más de siete meses de ofensiva. "Un alto el fuego inmediato es la única esperanza", ha sostenido.

El ejército israelí ha matado a tiros a un trabajador de una ONG y ha herido a otro en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, según funcionarios palestinos del territorio asediado. Según las autoridades locales, ambos se encontraban en un vehículo de las Naciones Unidas que exhibía la bandera y la insignia de la ONU cuando fueron atacados. La oficina de medios de comunicación del gobierno palestino en Gaza dijo que las dos personas alcanzadas en el ataque eran extranjeros. Los medios de comunicación locales dijeron que la persona muerta era u

La amenaza de Israel de una inminente embestida militar terrestre a Rafah empujó a 360.000 personas a huir la última semana entre continuos bombardeos que tienen paralizadas entregas de ayuda humanitaria, informó hoy UNRWA. Su comisionado general reiteró que no hay ningún lugar adónde ir. “No hay seguridad sin alto el fuego”. “Ya está todo dicho. No quedan palabras que puedan hacer justicia al pueblo de Gaza. Son personas, como tú y yo. Solían tener sueños, eran parte de una comunidad vibrante y diversa. Ahora, sólo son vidas y futuros rotos".

Más de 1,4 millones de palestinos -la mitad de la población de Gaza- se han refugiado en Rafah tras huir de los ataques israelíes. Y más de 34.000 han muerto en la ofensiva de Israel en la Franja

Según informa 'Reuters', el Ejército israelí ha pedido a los residentes de dicha zona que se dirijan al 'área humanitaria ampliada' en Al-Mawasi.

En Rafah se aglomeran más de 1,5 millones de palestinos, la mayoría desplazados de otras ciudades gazatíes bajo control israelí. Muchos allí no tienen dónde ir, pues está cerrada la frontera con Egipto, dónde existe otra Rafah. Fueron una vez una sola; siglos de invasiones y guerras terminaron con ella partida en dos. Su primera mención figura en una inscripción del 1303 a.C., en tiempos del faraón egipcio Seti I, padre de Ramsés II. Fue conocida como Robihwa por egipcios, Rafihu por asirios, Raphia por griegos y romanos y, Rafah por árabes.

Decenas de miles de palestinos exhaustos que ya habían sido desplazados de otras partes de Gaza recogieron sus tiendas de campaña y pertenencias en Rafah, y arrastraron a sus familias hacia un nuevo éxodo.

António Guterres, secretario general de la ONU, alertó de que la invasión terrestre de Rafah por Israel podría provocar "un desastre humanitario épico", tras fracasar esta semana las negociaciones para un alto el fuego en El Cairo. "Un ataque terrestre masivo en Rafah provocaría un desastre humanitario épico y acabaría con nuestros esfuerzos por ayudar a la población ante la inminente hambruna", dijo en la Conferencia de la Sociedad Civil de la ONU en Nairobi. "El derecho internacional humanitario es intachable: hay que proteger a los civiles".

Decenas de miles de personas palestinas desplazadas están huyendo de Rafah ante los ataques aéreos y bombardeos lanzados por Israel sobre la parte oriental de la ciudad. Luego de la toma de control del cruce fronterizo con Egipto por parte de Israel se ha interrumpido el ingreso de combustible, alimentos, medicamentos y otros suministros. El principal hospital de la zona también se encuentra cerrado. Más de 1,4 millones de personas están buscando lugares donde refugiarse en Rafah, la ciudad más meridional de la Franja de Gaza. Los campamentos q

En Rafah malviven hacinados más de 600.000 niños, según un informe de UNICEF en el que advirtió que son "altamente vulnerables y están al borde de la supervivencia". Una situación que se ha agravado tras el cierre del cruce terrestre de Rafah, tomado por tanques israelíes el martes, y desde donde entraban a diario a Gaza una media de 48 camiones con ayuda humanitaria y 166.000 litros de diésel, según la ONU. "Sin combustible, los camiones no podrán transportar asistencia humanitaria crítica, las bombas de agua dejarán de funcionar y los...

Mientras el ejército israelí arrasa Rafah, el Partido Popular, la embajada de Israel en España y organizaciones como el Movimiento contra la Intolerancia agitan el discurso sionista contra quienes denuncian el genocidio.

Los siete hijos de Rehab Abu Daqqa escuchan a los perros gruñir fuera, al otro lado del endeble plástico de su tienda de campaña. Los niños se apiñan alrededor de su madre. Ella es el último puerto seguro en sus vidas. Han vivido cosas, estos niños y su madre que son difíciles de explicar a quien no las ha visto. ¿Existe una palabra para expresar lo que siente un niño al saber que, a sólo unos metros de distancia, unos animales arrastran un cadáver desde una tumba? El vocabulario de la infancia se queda corto en medio de los horrores.

El ejercito israelí ha entrado con sus tanques a Ráfah donde ha retirado la bandera palestina e izado la israelí. Toma de esa forma el control del lado gazatí del puesto fronterizo de Ráfah, que separa la Franja de Egipto. Se trata del último refugio para 1,5 millones de palestinos desplazados a los que ya solo les queda la opción planteada por Israel, huir hacia la zona costera de Al Muwasi. La toma parcial de la parte este de Ráfah llega después de una noche de intensos bombardeos que han dejado al menos 23 palestinos muertos.

Los trabajadores humanitarios de la ONU reiteran que no abandonarán a los palestinos refugiados en Rafah, que han empezado a recibir órdenes israelíes de evacuar dada una inminente embestida militar. La agencia para la infancia alerta de los riesgos catastróficos que tendría esa agresión para 600.000 niños. Expertos denuncian abusos de los derechos humanos de mujeres y niños gazatíes.

La directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, ha descrito Rafah como "una ciudad de niños que no tienen ningún lugar seguro al que ir".

En las imágenes aparecen decenas de militares reunidos alrededor de otro soldado que entona las tradicionales oraciones judías antes de la operación terrestre. Muchos de los soldados lucen las típicas kipás en sus cabezas y están abrazados mientras se preparan para el ataque. Las oraciones terminan con el sonido del shofar, un instrumento de viento que se utiliza en la liturgia judía y que suele tocarse en las ceremonias del año nuevo judío o en el Yom Kippur.