Este año se cumple el 50 aniversario de la publicación del informe sobre los límites del crecimiento que auspició el Club de Roma. Aquel documento advertía que, de no frenarse la tendencia al crecimiento exponencial de la dimensión material de la economía, se desestabilizarían los ciclos naturales básicos, se alcanzaría el declive en la extracción de minerales, se produciría una importante pérdida de biodiversidad y de seres vivos y un descenso muy significativo de la población humana.