Tan solo el 24% del profesorado en España muestra ilusión por dar clase, frente al 60% que lo hacía en 2007. El incremento excesivo de la burocracia y la progresiva pérdida de poder adquisitivo, son algunos de los motivos.

Y otra empresa que debe dinero a la plantilla de dos residencias de mayores quiere volver a gestionarlas. La Comunidad de Madrid dice que se está aplicando de la Ley de contratos del sector público..

La Universitat de Barcelona (UB) ha firmado una instrucción en la que la institución renuncia al lenguaje inclusivo y apuesta por volver a utilizar el género gramatical masculino como neutro genérico excepto cuando se puedan "generar ambigüedades, imprecisiones o redactados de difícil interpretación", recoge el texto.

Ambos partidos están decididos a desmantelar la inmersión lingüística en catalán y dar más peso al castellano, pero los conservadores han presentado fuera de plazo sus enmiendas.

Me sorprende que hoy en día se use la etiqueta «lenguaje inclusivo», cuando lo que se hace al hablar es separar continuamente a los receptores de la información o a los sujetos de las oraciones, en hombres y mujeres, cuando lo que se pretende es que no se diferencie a las personas por su sexo. Lo inclusivo sería (es) que existiera (ya existe) una palabra con la que nombrar a todo el mundo, independientemente de su sexo. Estas palabras, en castellano, son las de género masculino. Usándolas, nos referimos a todas las personas, sean como sean.

La noticia la dan varios medios, entre ellos El País. Titular: “Los padres de un instituto de Valladolid denuncian que un profesor obliga al alumnado a tachar el lenguaje inclusivo de los libros”. ¿No es maravilloso que un artículo que da voz a los idiotas que persiguen a este profesor que obliga a sus alumnos a tachar el desdoblamiento de género no use el lenguaje inclusivo?

La ventana de atención de la generación Z apenas supera un segundo, y los escolares pasan al año más tiempo frente a una pantalla que el que dedican durante ese tiempo al colegio. Mientras los indicadores de resultados académicos retroceden, el debate sobre si la tecnología está dañando a los más pequeños se vuelve más intenso. ¿Se puede exigir a los escolares que sean analógicos en la era digital?

El portavoz del grupo parlamentario considera que el Gobierno de Azcón está generando preocupación en la comunidad educativa.

Los padres de un instituto público de Laguna de Duero (Valladolid) han denunciado que un profesor de tercero de ESO obliga al alumnado a tachar el lenguaje inclusivo de los libros de texto. El docente del centro Las Salinas imparte asignaturas como Geografía y ha sido en esta materia en la que ha forzado a sus pupilos a tachar la forma femenina de las expresiones “diputadas y diputados” o “senadores y senadoras” en los temas dedicados a explicar el sistema político parlamentario de España.

La Asociación Andalucía por la Enseñanza Pública ha revelado que el gasto para el profesorado de religión en el 2.022 ascendió a 116.819.203,68 euros. Esta cantidad, dividida entre las 2.785 personas encargadas de impartir estas clases, da un promedio de 41.945,85 euros por docente. Esta información subraya la inversión realizada en esta área, mientras que otros sectores educativos, como la atención a estudiantes con necesidades especiales o el personal de administración y servicios, continúan presentando deficiencias.