Bueno, proseguimos con una entrada más acerca de la Gran Guerra que viene de perlas para mejor compresión de la que se publicó ayer. Así, al espanto de verse formando parte de una carga de bayonetas, podremos añadir como eran las máquinas que segaban las vidas de los desgraciados que caían acribillados nada más salir de las trincheras. Hablamos, naturalmente, de las ametralladoras.