El abogado e histórico militante del PSIB, José María Lafuente, actuó como intermediario entre el Govern y una empresa proveedora de China, que vendió seis millones de euros en material sanitario, que fue repartido entre los distintos hospitales de la isla. Por su mediación, según informaba ayer la edición de El Mundo, Lafuente habría recibido una comisión económica del 1,5%, que sumaría algo más de 40.000 euros. Esta cantidad se ha reclamado al Govern a través de dos facturas presentadas por una abogada de origen chino.