En muchos sentidos las cosquillas siguen siendo un misterio. Desde su significado evolutivo al proceso por el cual se producen, pasando por su efecto, todos estos aspectos suponen un reto y un punto de interés para neurocientíficos de todo el mundo. A día de hoy no tenemos una respuesta clara, al menos tan clara como nos gustaría; aunque todo apuntaba a la propiocepción, la capacidad de detectar nuestro propio cuerpo. Las últimas pruebas nos hacen pensar en cómo funciona éste mecanismo y qué se esconde detrás de las cosquillas.
|
etiquetas: cosquillas , ti mismo