Gran parte del conocimiento y formación de personal cualificado se genera en nuestras universidades y centros de investigación públicos. Una forma de paliar el deterioro patente de la universidad pública sería implementar un “impuesto a la educación”, pagado por las empresas que usen personal o conocimiento en el que ha habido inversión pública previa.
|
etiquetas: educación pública , canon , impuesto a la educación , formación