Investigadores del Instituto Roslin de la Universidad de Edimburgo siguieron a las moléculas β-cateninas que son claves para el desarrollo de las nefronas, lo que les permitió crear este timelapse de la formación de un riñón de ratón. Al cambiar la actividad de la beta-catenina en diferentes lugares, los investigadores aprendieron que podían instruir a las células para formar las diferentes partes de la nefrona. Esto permitirá usar menos animales y obtener mucha más información que otras técnicas de imagen. Más:
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