Cuando Mónica Vega se realizó una ecografía durante el séptimo mes de embarazo de la que sería su tercera hija, a la que llamaría Itzamara, descubrió algo que no se podía creer. La prueba mostraba que, dentro de su vientre, se gestaba un bebé en cuyo abdomen había un feto más pequeño, con su propio cordón umbilical y rodeado de líquido amniótico. Es un extraño fenómeno que se da una vez entre medio millón.
|
etiquetas: gemelo , parásito