EL PAÍS participa en un experimento con alumnas de 17 años en un instituto de Madrid para analizar el impacto en su forma de relacionarse de las imágenes violentas, sexualizadas, nazis y homófobas que comparten con el móvil. A la pregunta ¿tienes en tus stickers contenido racista, machista, homófobo o violento? la mayoría de los chavales contestaron "sí", con anotaciones como “de Hitler y Franco, también de abusos”. Casi el 70% respondió que los guarda porque les “hace gracia”
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Pero esto de los stickers es deleznable. En el artículo el 3,4% de los encuestados dicen que estos stickers coinciden con su ideología. Estamos en un país donde gran parte de los jóvenes ven como modelos a la gentuza de Vox o la chulería de la innombrable. Creen que esto es la rebeldía, estar de parte de los soberbios. La rebeldía de hace décadas era el idealismo, el querer un mundo mejor, no esta mierda violenta.
(Luego también hay grados respecto a lo que sale en el artículo)
Me refiero a que el artículo mezcla stickers de mal gusto con verdaderos delitos.
Me llamó la atención que mucha gente ve videos de muertes reales o accidentes, yo no le encuentro ninguna gracia.
En fin Serafín!
Para empezar ninguna camiseta heavy podría haber puesto cosas como "negro, puaj".
Qué tendrá que ver una cosa con la otra.