Se acercan las fiestas navideñas y los escaparates, la televisión y la publicidad en general nos muestran una realidad evidente: todo lo que se considera de niños es azul, lo que se considera de niñas rosa. Detrás de esos colores se esconde, además, una realidad más dura, hay materiales destinados a niñas (generalmente relacionados al cuidado de los demás como las cocinas, planchas, juegos de peluquería, enfermería, etc.) y otros destinados a ellos, los niños, relacionados más con juegos de lucha, fuerza, investigación, etc.