El descubrimiento de un nuevo antibiótico producido por una bacteria de la flora vaginal abre la posibilidad de encontrar nuevos fármacos de interés en el mircobioma humano.

El servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva del Hospital Universitario de Alcira (este), ha reconstruido la vagina de una mujer de 54 años a partir de tejido de su propio yeyuno, una de las partes en las que se divide el intestino delgado humano.

Hasta cien mujeres asturianas han cedido ya las fotos de sus vaginas al proyecto 10.000 vaginas anónimas impulsado por el artista navarro Abel Azcona. Las cien instantáneas que, procedentes del Principado, se integrarán en las acciones performativas diseñadas por Azcona se han recogido in situ, en las dos galerías asturianas que colaboran con el proyecto, y también en la aplicación web creada al efecto.

Rokude, a sus 42 años se ha propuesto convertir a las vaginas en un nuevo símbolo pop. Entre sus obras, se encuentra un kayak con la forma de su propia vagina o una instalación donde las mujeres podían imprimirse sus partes íntimas en 3D.

La mujer, de 38 años, acudió al médico por problemas de salud serios. Hace diez años, mantuvo relaciones estando borracha y no recordó retirar el objeto. La retención más larga de un objeto extraño en un cuerpo humano es de 35 años

En principio, potencialmente, todas las mujeres tienen la posibilidad de experimentar orgasmos vaginales, de punto G o de cuello de cérvix. Se puede obtener bien manualmente, con juguetes sexuales o con el pene, siendo algunas posturas más propicias que otras. Sin embargo, para algunas mujeres resulta más sencillo que para otras. Las razones son variadas: mayor sensibilidad y/o tamaño del punto G o zona G, menores barreras mentales, mayor capacidad para dejarse llevar, etc.

Hijo de una prostituta drogodependiente, la infancia de Abel Azcona (Pamplona, 1988) ha estado marcada por el abandono, el maltrato y el abuso. Una dura vida que ha determinado sus creaciones artísticas. [Antes intentó] emular la vida en una placenta encerrado en una habitación de seis metros cuadrados y sin luz. El artista vuelve ahora a buscar ese objetivo, esa vuelta al origen, con su nuevo proyecto Vaginas anónimas, con el que pretende fotografiar 10.000 vaginas y vulvas. Su objetivo? Volver al origen, buscar una identidad

No es fácil estudiar las vaginas de los cetáceos, pero es necesario. Actualmente, los penes atraen de lejos mucha más atención en el mundo científico. (Esto también es patente en el panorama museístico, tristemente, en estos momentos. No hay vagina que rivalice al museo falológico de Islandia). Sorprendentemente, este desajuste se debe a estereotipos de género que se acarrean desde hace tiempo y probablemente no a la idea de que simplemente es más fácil observar un pene que una vagina.

Fotografiar 10.000 vaginas alrededor del mundo es, a priori, el objetivo que se ha marcado el artista navarro Abel Azcona. La iniciativa comenzó el pasado mes de mayo y ayer llegó a la gijonesa galería Mediadvanced. Fue ahí a donde las interesadas en participar tuvieron que acercarse para ayudar al artista en su propósito. Ocho mujeres anónimas posaron para el objetivo de Carmen Vázquez en el estu

La última 'performance' de la artista luxemburguesa Deborah de Robertis ha causado un gran revuelo en la sociedad francesa y en las redes sociales

“Piensa en tus bíceps. No ejercitas tus brazos sólo flexionándolos, sino que necesitas peso. La vagina trabaja de la misma forma: necesita peso para crear resistencia para fortalecerse”, explica la entrenadora de vaginas.

Una coach sexual sostiene que los famosos ejercicios de Kegel para fortalecer el piso pélvico no funcionan y que lo más efectivo es levantar pesas con la zona genital.

Un equipo internacional de científicos ha localizado en cuevas brasileñas el primer ejemplo de un animal cuyos individuos presentan los genitales del sexo opuesto. Se trata de las cuatro especies del género Neotrogla, un grupo de insectos que pueden estar copulando hasta 70 horas seguidas.