Fuera de las murallas romanas fueron arrojados varios cuerpos, al menos 13, que se presume fueron apilados y quemados con el fin de evitar infecciones.

Durante la II Guerra Médica los persas incendiaron y arrasaron Atenas en 2 veces. La 1ª bajo la dirección del propio Jerjes en 480 a.C., y la 2ª con Mardonio al año siguiente, en 479 a.C. Al final los persas fueron derrotados definitivamente en la batalla de Platea el 27 de agosto de ese mismo año 479 a.C., y los atenienses se apresuraron a reconstruir su ciudad bajo la dirección de Temístocles, que dio preferencia a las defensas frente a los templos y monumentos. Los espartanos se opusieron y Temístocles ideó una estratagema para engañarlos.

Los últimos trabajos han permitido identificar su primitiva muralla, la que se construyó durante el emirato Omeya en el siglo IX... En estado de ruina, el Castillo de la Estrella fue comprado en 2012 por seis mecenas, entre ellos el humorista José Mota , que lo cedieron al pueblo para que fuera investigado y recuperado.

Uno de ellos picó la piedra para intentar borrar su nombre y aumentó aún más los daños, que se han cuantificado en 7.900 euros.

Si bien la tragedia ya ocurrió, algo admirable del gobierno japonés es como se está preparando a futuro para enfrentar el próximo gran tsunami. Inmediatamente tras la tragedia, además de estudiarse las pérdidas se estudiaron los factores tanto humanos como de infraestructura que amplificaron los efectos del tsunami así como los que los disminuyeron. Esto llevó a que se creen nuevos protocolos y manuales de procedimiento, así como medidas económicas para aminorar el daño económico que pueda causar un nuevo gran tsunami en el futuro.