China y Estados Unidos están librando una batalla global por la información. Los cables submarinos son el nuevo recurso vital por el que pelear. Esta es una estación de cables en Marsella, Francia. Desde fuera, parece anodina. Pero bajo la superficie, se conecta a una vasta red de datos que comprende el 95% del tráfico mundial de Internet. Desde de 2021, la instalación de Marsella-Fos se conecta a dieciséis grandes cables submarinos, que dan servicio a zonas tan diversas como Hong Kong, Singapur, India, Omán, Egipto, Grecia, Gran Bretaña, Port

Internet se ha convertido en un elemento imprescindible en España, tanto para trabajar como para pasar el tiempo libro. Por ese motivo, siempre se quiere contar con las mejores velocidades, aunque para ello se pueden aplicar una serie de trucos, como saber el lugar ideal para colocar el router o realizar una simple acción para tener WiFi rápido. Algo que en China ya no tendrán que hacer, ya que el país acaba de estrenar la red de Internet más veloz del planeta, con la capacidad de descargar 150 películas de alta definición en tan solo 1 segundo

Esta infraestructura, que se extiende por más de 3.000 kilómetros conectando Beijing, Wuhan y Guangzhou, ha sido alabada por su capacidad para transmitir datos a una velocidad de infarto, equivalente a enviar 150 películas de alta definición en tan solo un segundo— tres veces más rápido que su rival más cercano en EEUU—.Este logro, anunciado oficialmente en julio y lanzado recientemente, no solo supera, sino que deja en el pasado las proyecciones de la industria.

Una investigación pone en duda los beneficios de la ‘desintoxicación digital’: tras una semana se reducían tanto las emociones negativas y las positivas. Definitivamente es un tema para el debate.

Quizás en el Siglo de Oro funcionase la retórica y la poesía para encandilar al sexo contrario. Más de 400 años después, la situación parece haber cambiado: según un estudio publicado en 2019 por la Universidad de Stanford, el 39% de las parejas estadounidenses se conocen a través de internet. 20 años antes este porcentaje alcanzaba un anecdótico 2%, pero por aquel entonces todavía no se había desplegado el verdadero potencial de las redes interconectadas.

La Directiva de la UE sobre derechos de autor es posiblemente la legislación reciente más importante en el ámbito de los monopolios intelectuales. También es un fracaso, juzgada puramente en sus propios términos como iniciativa para modernizar y unificar los derechos de autor en toda la Unión Europea. En su lugar, incluye muchas características retrógradas que van a contracorriente del mundo digital y ha fragmentado la legislación sobre derechos de autor digitales, ya que los Estados luchan por aplicar un texto mal redactado y contradictorio.